11. El Último Pasaje

Ahora era Miku la que recorría la Mansión del Sueño. Se encontraba en el altar del tatuaje. Salió de allí y cogió las hierbas de detrás del biombo como siempre. Se dirigió hacia la escalera  del otro extremo, apareció un hombre subiéndolas por lo que lo fotografió. Subió tras él y se iluminó el filamento azul, por lo que fue al lugar del fondo. Allí tomo una foto del altar y apareció una niña, que yo ya conocía y Miku también. Por lo que bajó de allí. Y se dirigió hacia el jardín.

Una vez en el jardín, atravesó la doble puerta y se situó en el patio del santuario. Cogió las hierbas de la parte de la derecha y se dirigió hacia el almacén de libros. Cruzó el almacén oyendo la nana que venía de arriba. Salió del almacén y se dirigió hacia el cuarto de kimonos para guardar. Una vez terminado, subió al cuarto de las gemelas. Después accedió por la puerta, y siguió subiendo por las escaleras hasta llegar donde se encontraba el foco de la nana.

Detrás del biombo, estaba la niña sacerdotisa que tanto había ayudado a Miku. La fotografió y le dejo un tomo "Rito de Mando" y una Luz Purificadora. Miku bajó de allí, se situó en el cuarto de las gemelas y salió. Cuando apareció de nuevo ese Ser monstruoso, El Kusabi, esta vez iba a por Miku. Pero ella salió corriendo hacia la izquierda, bajó las escaleras y se dirigió al almacén de libros rápidamente para así librarse de ese horrendo Ser.

Tenía que dirigirse hacia donde había tomado previamente la foto del altar, por lo que eso hizo. Atravesó el patio del santuario, llegó al jardín por lo que tomó el camino de la izquierda, abriendo la puerta que le llevaba al cuarto de persiana donde tenía que subir las escaleras y depositar el tomo que obtuvo en el altar.

Después de aquello, oyó como algo se abrió en el piso de arriba, por lo que subió por las escaleras y una vez arriba cogió la Luz Purificadora y accedió a la siguiente habitación. En la habitación centelleante, se dirigió al segundo pasillo, donde vio una pequeña puerta. Se dirigió hacia ella y una mujer aguja apareció a su espalda. Por lo que se giró y la fotografió. Después se dirigió al tercer pasillo, donde obtuvo el carrete tipo 90.

Luego se dirigió hacia la pequeña puerta del segundo pasillo y al acercarse a la puerta, la mujer aguja de antes le atacó. Miku se situó a distancia de ella, sacó la cámara y comenzó a almacenar, cuando llegó la oportunidad del disparo Cero, bastó con unos combos seguidos y carrete 14.

Después de acabar con ella, desbloqueó la peque puerta y accedió a la prisión colgante. La rodeó y entró dentro de ella para coger el Espejo de la Pérdida y el Diario Tatuado. Después de leer del diario, una niña apareció enfrente de la salida de la celda, por lo que Miku la fotografió. Salió de la celda y cruzó la doble puerta.

Bajaba las escaleras cuando otra niña apareció a su espalda, la fotografió. Bajó al piso de abajo y recogió otra Luz Purificadora y accedió al jardín. Una vez allí, aparecieron unas niñas junto al gran árbol que Miku retrató. Se dirigió por el corredor de la izquierda y acto seguido aparecieron de nuevo las niñas en el árbol, por lo que les volvió a tomar una foto. Después se dirigió al patio del santuario.

Una vez allí, caminó hasta la puerta del santuario (Si jugara por segunda vez, Kaname aparece a la derecha de la puerta). Al entrar y caminar un poco, Miku vio a la Cabeza de Familia Kuze rezando, por lo que le tomó una foto y la anciana se revolvió y atacó a Miku.

Como ya tenía una gran experiencia contra ella y se sabía sus movimientos, sólo tuvo que cargar la cámara con el máximo poder y asestarle un buen disparo Cero con el carrete tipo 61-90 y unos combos y se libró de ella.

Cuando la anciana se fue, Miku colocó el espejo en el altar y las cortinas del fondo se abrieron. Accedió a ellas, en la parte de la derecha pudo recoger otro carrete tipo 90 y finalmente abrió la puerta doble y accedió al último pasaje.

Nada más caminó un poco, la sacerdotisa apareció al final de las escaleras descendentes, por lo que sacó rápidamente la cámara y le tomó una foto lo más rápido que pudo. Después de aquello, guardó y bajó las escaleras para abrir otra puerta.

Apareció un repentino flash y Miku apareció de repente en una escalera con forma de espiral que parecía infinita. Fue bajándola y cuando casi llegó al final, fotografió a una niña que yacía empalada en el suelo.

Siguió bajando y cuando se acercó un poco a Amane, las demás niñas aparecieron buscando un combate en desventaja.

Miku ya conocía los movimientos de las niñas. Pero no podía asestarles combos seguidos ya que otra niña venía por la espalda. Por lo que Miku, cargó la cámara a tope con la habilidad Doble, como hasta ahora, pero ralentizó el tiempo con la Piedra Sagrada. Por lo que con sólo dos combos y utilizando el carrete 14-61, se libró de ellas rápidamente.

Después abrió la doble puerta y vio a su hermano a lo lejos, por lo que lo siguió velozmente. Llegó al final del puente y abrió la doble puerta. Yo me desperté del sueño y fui a ver a Miku a ver que le ocurría.

Cuando entré en su habitación, estaba encima de su cama. Me dijo que íbamos a morir, me acerqué y le pude ver como el mismo tatuaje que yo tenía por el cuerpo, ella también lo tenía y bastante extendido. Terminé de hablar con ella y me dirigí a mi cama a dormir, ya que intuía que el sueño de Miku aún no había terminado.

Le rogué a Yuu que me indicara si iba a continuar con vida y en efecto el sueño de Miku no había terminado. Se situó de nuevo en el vestíbulo de la Mansión Himuro. Avanzó y recogió las hierbas de atrás del biombo y guardó. Y se dirigió al cuarto de conservas donde vio a Mafuyu alejarse, le tomó una foto y siguió adelante. Continuó unos metros y vio una mano asomar por la ventana, la fotografió y se escondió.

Después siguió adelante, hasta que llegó al palacio de cuerdas donde Kizuna Himuro la esperaba. Miku ya conocía perfectamente los movimientos de este espíritu, por lo que utilizó el mismo proceso que con las niñas de antes. Pero esta vez utilizó el carrete tipo 61-90 para así no tener compasión con la sacerdotisa de cuerdas.

Una vez terminado el combate, Miku iba a regresar para olvidarlo todo. Pero Mafuyu apareció por la otra puerta. Entonces Miku decidió ir a por su hermano. Por lo que abrió la doble puerta y corrió hacia su hermano. Miku sabía que no podía seguir a los muertos, ya que si lo hacía no volvería de entre ellos. Pero insistió y fue tras su hermano. Yo le insistía en que fuera fuerte y que no lo hiciera, pero no me oía, sólo quería ir con su hermano. (Final Miku)

Me desperté y salí en busca de Miku con un gran dolor por culpa del Tatuaje. Llegué a su cuarto y la puerta se abría sola, se asomé y la vi acostada rodeada de espíritus, finalmente había caído inmersa en el sueño.

Después de estar un rato junto a ella, sonó el timbre, ¿Quien podría ser? Recodé que Kei dijo algo de venir a vernos, por lo que bajé y le abrí. Subimos al cuarto de Miku para que viera lo que le había ocurrido. Le dije que no podía más y que si íbamos a morir, ya que la situación no mejoraba.

Bajemos a sentarnos en el salón, Kei sacó un libro y comenzó a leerlo. Después me dijo que teníamos que tener esperanza, por lo que me levanté y me puse a mirar por la ventana. Revisé todas las notas y le hablé a Kei y él me dio el tomo "Rito de Mando" y la "Leyenda canción 2". Después de leer dichos tomos, me dijo que la clave estaba en que había que empalar a la Sacerdotisa para que durmiera en paz.

Le hablé de nuevo y me entregó una foto de Mio. Por lo que tenía que buscar más información y me dirigí al cuarto de Yuu. De allí obtuve el cuaderno "La Sacerdotisa Dormida" y una cinta. Bajé a dársela a Kei, pero me dijo que la oyera en mi radio.

Volví a mi cuarto, ya era de noche, por lo que bajé al salón. Kei estaba durmiendo. Yo me dirigí hacia el cuarto del altar de Yuu donde pude ver a la Abuela con su carro, la fotografié y me fui a dormir ya que el día había sido duro.

Guia Project Zero 3 de BenJa - KuMo está registrada bajo una licencia española de Creative Commons.

Tweet